CARIÑO
Buenas noches nocturnas… He salido al balcón, lo confieso. No por entretenerme con el paso indesmallable de los autos conducidos por seres humanos, lejos todavía el coche autónomo. No por afrontar, como temerario guerrero de la nada que se ofrece para exponer sus tímpanos al fragor indeclinable de una ciudad en fiestas, la pesadez. No. Ha sido para comprobar las virtudes de mis receptores auditivos y si era capaz de escuchar las carcajadas. Las que deben atronar en París, capital de los Juegos, y en el resto de ciudades del continente. Como en algunos momentos me pareció la voz del narrador televisivo, durante el partido de waterpolo que enfrentó a las nadadoras españolas y a las de Países Bajos, cuando las del gorro blanco- las chicas entrenadas por Miki Oca evolucionaban con otro de color rojo- reducían y lograban superar un tanteo holgadamente adverso; como anunciara la calidad de cadáver de quien viviera como dictador, de nombre Francisco Franco, el difunto Arias Navarro, todo huele hoy a fiambre y da risa. Mucha risa: “Españoles: Puigdemont es una farsa de la que somos paganos gracias a la ineficacia de nuestras instituciones”. El que más se ríe- hospitalizado debe estar por un ataque incontenible- el que más se ríe es el del flequillo que fuera “Molt Honorable”. El caso es que no he podido escuchar nada. No ha podido ser para mí, pero he de investigar, pues es posible que se haya producido algún movimiento sísmico a causa de los espasmos y convulsiones que habrán acompañado a las carcajadas europeas. En esto, en que se rían de nosotros, medalla de oro. Pero, bien. Bien está. No vengo a escribir de política. No vengo a explicar nada de eso. Solo constato lo que hay. Y, hoy, hay también, se celebran, eso dicen, otras cosas. Por ejemplo, el Día Mundial de los Faros. Hágase la luz. Lo sé al examinar una publicación de Pedro Torrijos*, “escritor, crítico cultural y arquitecto español, más conocido por su faceta divulgativa en distintas redes sociales”- según figura en la Wikipedia- aparecida en la red social X**. Informa de lo anterior y facilita una fotografía realizada por él en el año 2021. Concretamente del faro de Cabo Ortegal. Claro, enseguida he querido saber dónde se localizaba esa torre. Y me he ido a Galicia. Para más señas, al ayuntamiento de Cariño, en A Coruña. Entonces, antes que ninguna otra cosa, me interesé por ese nombre, “Cariño”. Cariño no es un nombre común, pero los hay más raros. Al fin, en una web de nombre FURGONETEATE***, se facilita una breve leyenda que lo explica. Cuentan que, “el Señor do Castro, enterró en este lugar a su hija más hermosa. Cuando se fue de estas tierras junto al rey celta, Ith, se despidió con un ‘Adiós, Cariño’, suceso que daría nombre al lugar”. Conforme a esto, este jefe tuvo más hijas y, desde luego, menos bellas. ¿Tendría hijos también y ninguno opositor a modelo de pasarela? Nada he podido saber. Al contrario de lo ocurrido con Ith****: “En el Libro de las Invasiones de Irlanda, Ith es uno de los diez hijos del caudillo celta Breogán, esposo de Bron y padre de Lugai; de la estirpe de los gaedil”. Asuntos de mitología. Misterio sin esclarecer el del enterramiento de la joven agraciadísima. Habré de comunicar con los mejores rastreadores que operan en la internet profunda. Un pico me va a costar. Por lo menos me olvidaré del ridículo. De las risotadas servidas en bandeja de plata por el bufón catalán. Puchi, claro. Eso sí: las chicas del waterpolo jugarán la final, gracias a un balonazo más, dentro de la portería defendida por las de Países Bajos. Me destoso.
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https://es.wikipedia.org/wiki/Pedro_Torrijos
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https://x.com/Pedro_Torrijos/status/1821210362139590839
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https://furgoneteate.com/lugares-paises/espana/galicia/coruna/comarca-de-ortegal/carino/
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https://es.wikipedia.org/wiki/Ith_(mitolog%C3%ADa)
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