DE LA GENTE QUE ME PARA POR LA CALLE


Buenas noches nocturnas... Una cosa que se puede hacer a la hora de emplear las llamadas inteligencias artificiales, es solicitar que actúen de una determinada manera. Al menos algunas así lo permiten. Por ejemplo, «actúa como si fueras un bombero y...». Claro: la máquina se abstendrá de apagar el incendio, porque no puede, salvo que esté conectada a un dispositivo fabricado para cumplir con esa finalidad. Pero puede adoptar terminología o proposiciones dignas de un bombero. ¿Para qué puede servir todo esto? Las utilidades habrán de ser definidas por cada uno de los usuarios y  estarán conformes a la idea de obtener algo que la persona en cuestión tenga en mente. Yo mismo soy una inteligencia artificial. Digo que, aunque mi cerebro es un órgano del todo natural, los pensamientos que elaboro, de los que me doy cuenta—y estoy dispuesto a admitir que lo que yo creo generado a partir de la suma o de la resta de mis conocimientos no sea otra cosa que la consecuencia de combinar impulsos eléctricos para transmitir órdenes y modificarlas mediante la contención o la liberación de sustancias químicas—, mis pensamientos, son cosa que se abastece de una materia no configurada corporalmente. No viene, como se diría en términos automovilísticos, de serie. Por lo tanto, si me comprometiera para realizar labores teatrales saliendo a escena, podría considerar algunas conductas a fin de representar algo. Algo distinto a lo que soy. Por ejemplo, puedo decidir que he de actuar como un famoso. No importa, de momento, qué famoso. Además, si famoso: yo mismo. ¿Famoso por qué? Olvídense. No es de este famoso, yo, de quien hablaremos... bueno, lo haré yo solo. Esto es un monólogo. Ustedes leen o no leen. Luego, si tienen una opinión distinta, tratarán con ustedes mismos para desautorizarme. Si los he importunado hasta el punto de descartar para siempre toda posibilidad de atención hacia nada que pueda ofrecerles, a ello; y, si he propagado el aburrimiento, tres cuartos de lo mismo. Así pues, una característica de los famosos, de los notables, incluso, de los sobresalientes, es ampararse en lo que otros, acudiendo a ellos por las calles, aseguran, en contra de lo estimado por quienes les criticaron. «No es eso lo que me dicen las personas que me paran cuando voy a pie». Y esta forma de proceder, esta argucia defensiva, es elástica y eficaz. No puede ser constatada de manera que evidencie ánimo de mentir. En las redes sociales, los juicios adversos, las descalificaciones, quedan anotadas- si es que el usuario admite la participación de extraños- se pueden examinar y colegir de lo allí visto, la aceptación o el rechazo. Pero, la gente que lo para a uno por la calle, y lo felicita, dice, no cambies, sigue así, me conmueven tus palabras, llevabas razón, te admiro mucho... esa gente, ¿quién es? ¿Tiene nombre, siquiera fingido? ¿Es una función robótica manejada por terceros? ¿Dónde están? ¿Cuándo ocurrió que lo pararon a usted, señor famoso? Sea como fuere, las personas que paran al famoso por la calle siempre están a favor de lo que diga, de lo que haga, de lo que desee, de lo que pregone el famoso, incluso cuando el famoso se equivoca o delinque. Esta parte de la población humana, que sin duda existe, ¿es parte de las proyecciones que tengan los cerebros de los famosos, una ensoñación sobrevenida, una habilidad? Porque nunca se ha podido documentar alguno de estos hechos. Y, si se ha conseguido, no será difícil comprobar su guionización. En cualquier caso, esto solo puede ser un recurso aceptable a partir del momento en el que se adquiere cierta fama. A las personas sin notoriedad les está vedado. No pueden decir, pongamos, un viandante que va a comprar el pan y se cruza con el propietario del quinto, la gente me para a fin de felicitarme por lo bien que saco la basura todos los días, vecino. No pueden sostenerlo. Es decir, sí pueden, pero no tiene sentido. No lo tiene. Y, como yo deseo que lo tenga, he elegido actuar como famoso para poder defenderme de las críticas que recibiré apelando a esa gente, al pueblo, a la ciudadanía. He dicho. Me destoso.



La imagen se obtuvo tras editar una instantánea facilitada mediante los servicios que proporciona FREEPIK





Selección gráfica del día...

JL MARTÍN en La Vanguardia 22 de diciembre de 2024



Kentaro Miura en la cuenta de X de @lavidaenvinetas 22 de diciembre de 2024



Tanaka Ryohei en la cuenta de X de @fraveris 22 de diciembre de 2024



Selección de contenidos...

Primera:

The Mills Brothers sing "Basin Street Blues" & "Up a Lazy River" with the Boston Pops (1980)

En el Canal pianopappy

https://www.youtube.com/watch?v=_ocsnsUabWQ



Segunda:

Etta James - I'd Rather Go Blind (Live at Montreux 1975)

En el Canal GIGS

https://www.youtube.com/watch?v=uZt1xKtPbUQ



Tercera:

Eric Clapton - Steve Winwood (Can't find my way home)

En el Canal Ant Varandonis

https://www.youtube.com/watch?v=8L82II1lNjo
















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